Bueno, parece que smart tiene asegurado su futuro a medio plazo. Cualquier duda que pudiésemos albergar hasta hoy se ha desvanecido con la firma de un acuerdo de gestión conjunta entre Daimler AG y Geely Holding. El grupo alemán (dueño y señor de marcas como Mercedes-Benz y la propia smart) y el conglomerado chino (propietario de Volvo y Polestar) pondrán en marcha este mismo año una joint-venture participada al 50:50 en la que unos y otros controlarán como socios igualitarios el devenir de la marca de coches urbanos.
El contrato de colaboración prevé que ambos grupos aporten su conocimiento y experiencia en las áreas de investigación y desarrollo, fabricación, gestión de proveedores y marketing; si bien cabe esperar un mayor peso por parte de Daimler en el apartado del diseño y de Geely en el de la ingeniería.
Por supuesto, la otra gran consecuencia será la expansión de smart hacia el mercado chino, en cuyo país serán fabricados los nuevos modelos (eléctricos, cómo no) que verán la luz en 2022; hasta entonces proseguirá la fabricación de los actuales fortwo y forfour en Francia y Eslovenia. Así pues, la nueva joint-venture entre Daimler y Geely reafirma la intención de convertir a smart en una marca de automóviles 100% eléctricos y no sólo pequeños: también se anuncia la llegada de futuros modelos encuadrados en el segmento B, el de los utilitarios.
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Ah, y hablando de próximos modelos; Daimler ha aprovechado la ocasión para confirmar un secreto a voces: que ya está en marcha el desarrollo del próximo compacto eléctrico de la submarca EQ. Aceptamos apuestas a favor y en contra de la denominación EQA.