BMW 428i Cabrio

El nuevo BMW Serie 4 Convertible es un lujo para esos días en los que el sol parece invitarnos a pasear y disfrutar del buen clima. Con la base del Serie 4 Coupé, el nuevo cabrio de BMW mantiene las características de aquél pero con un techo duro retráctil en tres partes de accionamiento eléctrico que nos permitirá disponer de todas las ventajas de un descapotable. Y tampoco “sufriremos” si el día no acaba de ser todo lo bueno que querríamos. El nuevo descapotable de la firma alemana presenta algunas mejoras que hacen más confortable circular a cielo abierto incluso cuando no hace un día fantástico.

Está disponible con un motor de gasolina de seis cilindros en línea turbo -435i-, con el motor diésel de cuatro cilindros -420d- y con el que equipa nuestra unidad de pruebas que no es otro que el de gasolina de cuatro cilindros en línea turbo -428i-, de 245 CV. Este motor es el más potente de los de cuatro cilindros y tiene un rendimiento al litro espectacular. Con este motor, el nuevo Cabrio ofrece unas prestaciones brillantes -con menos consumo y ajustándose a la norma Euro 6-, combinándolo con su buen hacer dinámico, en el que también ha trabajado la firma bávara.

Estéticamente mantiene las líneas del Serie 4 Coupé e interiormente la estructura de las últimas versiones de la firma alemana, con “todo” orientado al conductor y con el tablier y la consola central como protagonistas. Pero ha crecido respecto al Serie3 anterior. Ahora es más ancho -1,82 m- más largo -4,64 m- y mantiene la misma altura -1,38 m-. La batalla también ha aumentado siendo ahora de 2,81 m, frente a los 2,76 del Serie 3, así como el ancho de vías delanteras y traseras. Es decir. Es más grande. Y también dispone de más espacio en el habitáculo.

La habitabilidad de las plazas traseras es mayor y más aprovechable al contar con un buen espacio para las piernas y una mayor altura libre para la cabeza. Asimismo, recibe novedades como los asientos con guía integrada para el cinturón de seguridad, regulación eléctrica de los asientos de serie y las mejoras a que hacíamos referencia al inicio para viajar más confortablemente cuando la temperatura no sea alta.

Para ello, el Serie 4 cabrio ofrece -opcionalmente- un sistema de calefacción con salidas en los asientos a la altura de la nuca -tanto en los asientos de serie como en los deportivos- opcionales- y un deflector más ancho en los lados que evita la turbulencia del viento detrás de los asientos. El deflector es ahora más ligero, su utilización es más sencilla y su eficiencia es mayor. Por su parte, la climatización también contribuye a rodar confortablemente. Con el coche descapotado, el nuevo climatizador se autorregula automáticamente en función de la temperatura exterior y de la velocidad a la que circulemos.

El BMW Serie 4 Cabrio se olvida de las lonas y mantiene la apuesta iniciada en la generación anterior por un techo duro de tres segmentos abatible que le da una funcionalidad extraordinaria (el que quiera una capota de lona deberá esperar al inminente Serie 2 Cabrio). En este Cabrio, que apenas es 7 mm más alto que el coupé, la estructura del techo ha sido mejorada con un material que reduce los ruidos del viento logrando un aislamiento del habitáculo superior al de su antecesor.

Bastará pulsar un botón situado en la consolota central para que el techo se abra en apenas 20 segundos, transformándose en un elegante descapotable con un aire ciertamente deportivo. Si es necesario, el techo también puede abrirse mientras el coche está en movimiento -BMW dice que hasta 18 km/h-. A nosotros nos parece poca velocidad para que resulte efectivo, pero mejor eso que nada.

Cuando el techo está recogido en el maletero, éste ofrece una capacidad 220 litros gracias a un sistema electro-hidráulico que lo eleva en el interior para poder alcanzar esa cifra y logra que el acceso al maletero tenga el mismo ancho que con el techo cerrado. Cuando vayamos capotados, la capacidad de carga será de 370 litros -20 litros más que su antecesor-.

Cuando circulemos en “modo coupé”, en los laterales del maletero dispondremos de dos vanos portaobjetos para utensilios de menor tamaño. Abatiendo el respaldo de los asientos traseros se obtiene una superficie plana, apropiada para transportar objetos más grandes y también se puede optar por la abertura central para transportar objetos largos como los esquís.

Como suele ser habitual en este tipo de coches, si lo queremos bien equipado nos saldrá más caro de lo deseado. De serie, el Serie 4 Cabrio incorpora airbags frontales y laterales de conductor y pasajero, ISOFIX en asientos traseros, antibloqueo de frenos ABS, ayuda al arranque en pendiente, control de estabilidad DSC, control de frenado en curva CBC, control de tracción DTC, control de crucero con función de frenado, control de presión de neumáticos y faros bixenón en lo que a seguridad se refiere.

Para que viajemos confortablemente dispondremos de asientos con regulación eléctrica, climatizador, sensor de auto-encendido de luces, función start/stop, luces de lectura de LED, sensor de lluvia, modo ECO PRO y volante de cuero multifunción. El resto, deberemos abonarlo a parte. Además de la versión con el equipamiento básico, pueden adquirirse otras tres líneas de equipamiento así como un kit deportivo M. Las líneas de equipamiento Sport Line, Modern Line y Luxury Line permiten personalizar tanto exterior como interiormente el coche y tienen un coste de 4.412 €.

La línea Modern Line incluye molduras interiores negro de brillo intenso, tapicería de cuero "Dakota", llantas de aleación 8 x 18 (con gomas 225/45) con diseño de turbina, paragolpes con contenidos específicos en aluminio satinado y molduras de entrada en aluminio con anagrama "BMW Modern". La Luxury Line ofrece moldura de entrada con inserción en aluminio y anagrama "BMW Luxury", llantas de aleación 8 x 18 (225/45) de radios múltiples, revestimiento de madera noble "Fineline" antracita, parachoques delantero y trasero con molduras en cromo de brillo intenso, tapicería de cuero "Dakota". El Sport Line dotará a nuestro Cabrio de molduras interiores negro de brillo intenso, asientos delanteros deportivos, parachoques delantero y trasero con embellecedor en negro de brillo intenso, moldura de entrada con inserción en aluminio y anagrama "BMW Sport", llantas de aleación 8 x 18 (225/45) de radios dobles y tapicería de cuero "Dakota".

La opción más costosa pero también la que más mejorará nuestro coche en el Paquete Deportivo M. Si nos gastamos los 5.896 € que cuesta dispondremos de molduras interiores Aluminium Hexagon, volante M de cuero, suspensión deportiva M, asientos delanteros deportivos, paquete aerodinámico M, asientos delanteros con calefacción, llantas de aleación M 18" (delante 225/45, detrás 255/40) de radios dobles, Shadow Line de brillo intenso BMW Individual, tapicería de cuero "Dakota" y molduras de entrada M.

Otros, como el Paquete Cabrio, incluye 9 altavoces HiFi (205 W), deflector de viento, asientos delanteros con calefacción y calentador de nuca para conducción con capota abierta. Estas son los principales “paquetes que BMW ofrece, pero podemos escoger opciones fuera de ellos como los faros LED autoadaptables, el chasis M adaptativo con control de la amortiguación, navegador Professional con pantalla fija de 8,8”, reproductor de DVD y disco duro, incluyendo 20 GB para archivos de audio.

También podemos elegir el paquete de servicios ConnectedDrive, 9 altavoces HIFI, volante con calefacción -226 €-, sintonizador de TV -2.016 €-, Sonido Surround Harman Kardon -1.293 €- advertencia de cambio de carril -664 €-, asistencia de aparcamiento -415 €-, función de frenado City -616 €- Head-Up Display -1.163 €- y otros muchos extras que varían el revestimiento interior, tapicerías, llantas, telefonía de confort… No cabe duda que en el serie 4 -y en todos los BMW- para disponer de un buen equipamiento tenemos que recurrir a opciones -en nuestra opinión- demasiado costosas.

El chasis del nuevo BMW Serie 4 Cabrio es, básicamente, el mismo que el del coupé con reglajes adaptados a las exigencias específicas de un descapotable como el que nos ocupa. Por ello, se ha logrado optimizar la agilidad y la direccionalidad a base de variar la caída, la convergencia y el avance de la suspensión. Y con unos refuerzos especiales en la parte delantera, se ha buscado aumentar la precisión de la dirección y conseguir un coche estable que dinámicamente esté a la altura de sus prestaciones.

Unas prestaciones que proporciona el motor de cuatro cilindros en línea turboalimentado de 1.997 c.c. situado en posición longitudinal. Entrega una potencia de 245 CV, entre 5.000 y 6.500 rpm, y un par máximo de 350 Nm, a partir de 1.250 y hasta 4.800 rpm. La unidad que veis en la prueba montaba el cambio automático de 8 relaciones con función Start/Stop de la firma bávara que, dicho sea de paso, a nuestro entender es uno de los mejores del mercado.

El cabrio Serie 4 equipado con este propulsor es capaz de realizar los 0 a 100 km/h en 6,4 segundos y alcanzar una velocidad máxima de 250 km/h limitada. Una cifra de aceleración más lenta que la del coupé en la que, a buen seguro, influyen los 210 kg de diferencia que hay a favor de este último -1.755 kg el cabrio, 1.545 kg el coupé-. Como suele ocurrir, no hemos sido capaces de obtener las cifras de consumo que BMW cifra en 6,6 litros de media para el 428i cabrio, y nos “fuimos” hasta los 8,2 litros, eso sí, conduciendo con normalidad, sin buscar records.

Imagino que nadie tiene dudas de que pasear tranquilamente con el 428i Cabrio por una carretera con un bonito paisaje, disfrutando de la sensación de libertad que proporciona el aire en nuestro rostro y saboreando su suavidad de marcha es un lujo. Un lujo y un gusto porque el Cabrio transmite seguridad y calidad y se disfruta al conducirlo. En esas circunstancias, el 428i “descapotable” muestra todo lo bueno que tiene. Un motor que responde desde abajo con contundencia, una suspensión con un tarado cómodo y un cambio automático que “enlaza” las marchas con suavidad. Una delicia.

Su buscamos una conducción eficiente y mejorar los consumos, el modo Eco Pro, nos ayuda a ello. El tacto del pedal “se resiste” más a nuestra demanda y se activa el modo “planeo” que desacopla el motor de la transmisión cuando rodemos a velocidad constante. Pero este Cabrio no sólo nos dejará disfrutar “paseando bajo el sol”. Si lo deseamos, obtendremos un cambio de carácter notable cuando activemos el modo Sport -tarado de suspensión más duro con la opción de suspensión adaptativa, gestión del cambio más corto y respuesta del acelerador más rápida-, que convertirá nuestro Cabrio -con el techo cubriéndonos o sin él-, en un deportivo capaz de hacernos disfrutar donde las curvas se sucedan.

El propulsor ofrece una respuesta fantástica, con la suspensión “dura” la estabilidad es elevada, la dirección precisa y directa aunque, pese a seguir siendo de las mejores, nos ha gustado menos que en otras ocasiones -quizá se trataba de nuestra unidad de pruebas y en todo caso estamos hablando de matices de sensaciones.- Y si “se nos va la pinza” y aún queremos más, desconectamos los controles y a disfrutar de los 245 CV en el tren trasero.

Sea como sea, el nuevo Cabrio ofrece un gran rendimiento en todos los aspectos. Acelera con rapidez, es estable, ágil, dispone de una frenada potente y resistente a la fatiga y permite un paso por cura muy elevado. Eso sí, el tarado de la suspensión standard se muestra demasiado suave para una conducción deportiva lo que, prácticamente, nos obligará a adquirir la adaptativa si somos de “pie fácil”.

Creemos que a casi nadie le importaría tener un descapotable como éste en el garaje. Tiene una línea, una imagen, verdaderamente atractiva. La incorporación definitiva del techo duro es, en nuestra opinión, un acierto que permite disfrutar de un coupé “casi” auténtico y de un fenomenal descapotable que ofrece todas las ventajas de éstos. En su interior no falta de nada, es cómodo, elegante, las plazas son amplias y dinámicamente está a un gran nivel. Claro, ahora llega lo menos bueno.

Su precio. El 428i Cabrio cuesta 51.500 €. Equipado como el que veis en las fotos, 64.916 €. Está claro, no es económico. Pero no hay que rasgarse las vestiduras. Ya sabemos que un coche potente, lleno de tecnología y con materiales de calidad, económico no va a ser. Lo que sí es cierto, al menos esa es nuestra opinión, es que las opciones -cuando menos algunas- tiene un precio demasiado elevado. Temas económicos al margen, debemos decir que el Serie 4 Cabrio nos ha gustado mucho por su tacto, prestaciones e imagen.