El proceso de desarrollo aerodinámico del híper-coche de Aston Martin, rebautizado como Valkyrie, ha introducido cambios en el diseño exterior. Una creación obra de la histórica firma británica junto a Red Bull Advanced Technologies que en 2016 nació bajo el nombre de AM-RB 001.
Aquello que la forma deriva de la función es aplicable al 100% en este biplaza de altísimas prestaciones. Todas y cada una de las líneas de su minimalista carrocería se encargan de potenciar al máximo la aerodinámica.
El Valkyrie es lo más parecido a un prototipo de los de antes, recuerda bastante al Peugeot Proxima que en 1986 pude ver en vivo y en directo en el Salón de Barcelona. Años después lo volví a ver en el Museo Peugeot de Sochaux.
Una silueta espectacular cuyo dramatismo se completa con las puertas alas de gaviota que tienen un cierto parecido con las del Pagani Huayra. Las llantas rompen con todo lo que hay ahora en el mercado. El diseño es realmente atractivo, será cuestión de ver qué tal refrigeran los frenos al ser tan cerradas.
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A simple vista queda claro que no será un coche apto para todos los públicos. Estaría bien que Aston Martin facilitara un tutorial de YouTube para mostrar la forma correcta para entrar y salir del habitáculo. Salvar el aparatoso monocasco de carbono no será tarea fácil. Quizás con una escalerilla de esas de tres peldaños…
La posición de conducción es parecida a la que adoptan los pilotos de los prototipos del WEC, muy reclinada hacia detrás, casi estirada. En el volante se integran todos los mandos, al estilo de lo que hemos visto en el nuevo Ford GT.
En la parte central del salpicadero hay una pantalla que completa la instrumentación de la pantalla OLED del mismo volante. En los extremos del parabrisas asoman dos pantallas más, en las que se proyectan las imágenes de las cámaras traseras a modo de espejos retrovisores.
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cierto jajajajaja