¿Dónde está el lujo en un Range Rover?

En la casa Range Rover están convencidos de que el modelo que da nombre a su marca es la máxima expresión del lujo sobre cuatro ruedas; tan seguros están, que nos han invitado a descubrir dónde se percibe el lujo en un automóvil como éste. Pero... ¿qué es el lujo? ¿En qué consiste? Vamos a dedicar este vídeo a descubrirlo, así que ¡al lío!

Según el diccionario de la Real Academia Española, la palabra 'lujo' quiere decir “Elevada categoría, excelencia o exquisitez que posee algo por la calidad de las materias primas empleadas en su fabricación, sus altas prestaciones, etc”.

En el caso concreto del Range Rover, lo que está muy claro desde el principio es que, para el buque insignia de la marca, es aplicable otra acepción de la palabra lujo: “Aquello que supera los medios normales de alguien para conseguirlo”.

Vamos, aquello que cuesta un dinerito importante; como el modelo que os mostramos en este artículo: un Range Rover Autobiography con su motorización híbrida enchufable más prestacional; un automóvil que se muestra capaz de superar no una sino tres barreras: la de los 500 CV de potencia, la de los 100 km de autonomía eléctrica… y la de los 180.000 euros de precio de compra.

Dejando a un lado su coste de adquisición, este todoterreno de más de cinco metros de largo nos lleva a ese otro sentido del lujo, el que se asocia a la excelencia. Este es un automóvil gigantesco y sin embargo elegante, de diseño rotundo pero suave, con una línea modernizada y aun así atemporal, y con un carácter que invita a aventurarse por cualquier camino o abrirlo si no existe.

El exterior del vehículo muestra detalles muy cuidados como la manera en la que la sección acristalada -que llega al pilar trasero- desemboca en el metal, el perfecto alineado de las planchas de la carrocería, el suave accionamiento de los tiradores escamoteables, el cierre automático de las puertas, y cómo las ópticas traseras sólo revelan su posición con el vehículo encendido. Queda claro, por esto y mucho más, que el diseño es uno de los aspectos que nos hacen percibir al Range Rover como un SUV o todoterreno de lujo.

Si el Range Rover transmite lujo hacia el exterior, donde mejor podemos sentirlo es en el interior. Su habitáculo es pura exquisitez; en parte por su diseño relativamente clásico, pero sobre todo, por la calidad de materiales y acabados.

Así, hay detalles que "entran por los ojos", como los recubrimientos de piel que llegan hasta el techo; las molduras de madera no solo parecen de madera: lo son, y las piezas que parecen de metal, son de metal. Otros detalles los percibimos por el tacto, como la suavidad de las de las tapicerías; y algunos nos llegan incluso por el oído, como el clic del mando del volumen.

La firma británica también pretende transmitir lujo a través de la tecnología de su sistema de infoentretenimiento; algo en lo que es difícil distinguir a un automóvil actual de los de su competencia, y lo hace estando a la última en cuanto a diseño y funcionalidades. Llama la atención, asimismo, la sutilmente curvada superficie de la pantalla central.

Aparte de lo mencionado, hay otros detalles a destacar como las dos guanteras con accionamiento eléctrico, el suave mecanismo de apertura de las bandejas de la consola y el forrado de los distintos espacios de almacenamiento.

Las plazas traseras son verdaderamente señoriales. El Range Rover que aquí os mostramos dispone de tres plazas, pero en realidad está pensado para que dos personas viajen de manera confortable; algo que se nota nada más descubrir el mecanismo eléctrico del reposabrazos central. Un reposabrazos que, además, nos presenta un panel de control desde el que podemos manejar la climatización, el ajuste de los asientos y la iluminación del habitáculo. También podemos, usando los mandos de las puertas, encender luces de lectura para libros o pantallas así como accionar los parasoles de las ventanillas.

Dado que, además, encontramos en esta segunda fila el mismo nivel de calidad y refinamiento que en la primera, será un auténtico placer viajar como pasajeros siempre que tengamos la ocasión de hacerlo.

El espacio de carga no acostumbra a concentrar el lujo de un automóvil. Aún así, además de ofrecer 725 litros de capacidad con las cinco plazas en uso, el maletero del Range Rover atesora funcionalidades como el plegado remoto y eléctrico de los asientos y la posibilidad de rebajar la altura del vehículo para que sea más fácil sentarnos en la sección inferior de su portón dividido.

Puede que el Range Rover sea un coche particularmente indicado para no conducirlo y, simplemente, dejarnos llevar; pero, al situarnos frente a sus mandos, nos damos cuenta de que un vehículo de esta clase también nos hace sentir el lujo cuando decidimos ponernos al volante.

Este lujo nos llega en forma de placer de conducción; pero a diferencia de lo que sucede en un superdeportivo de altas prestaciones, este automóvil poderoso pero suave no busca segregar adrenalina: prefiere saltar directamente las endorfinas. Desde luego, el Range Rover tiene potencia de sobra; pero, dado que es al mismo tiempo un coche grande y pesado, el lujo se manifiesta a través de su tecnología, y a cómo la aplica para favorecer el confort de marcha.

En este sentido, el Range Rover equipa un sistema de tracción a las cuatro ruedas con diferenciales bloqueables y eje trasero direccional, sistema gobernado por un control electrónico de estabilidad que ofrece distintos programas de conducción. Además, el sofisticado equipo de suspensiones neumáticas con ajuste de la amortiguación y de la altura de la carrocería procura que el vehículo gire lo más plano posible mientras copia la superficie sobre la que circula; y  con ello, se encarga de aislar a sus ocupantes de las irregularidades del terreno. No solamente eso: los aísla de casi todo lo que sucede a su alrededor.

Precisamente, ese “aislamiento” del habitáculo es la mejor manera de sentir el lujo en movimiento. Dejar a un lado las vibraciones, el ruido de rodadura y aerodinámico, e incluso el sonido del motor es una experiencia relajante. Una experiencia de lujo.

Contenido patrocinado por Range Rover.