El Volvo XC60 Black Edition es una edición especial sobre la base de la segunda generación del Volvo XC60. No hay cambios más allá de su apariencia, en la que Volvo apuesta por el color negro para todos y cada uno de los elementos de su diseño exterior, lo que aporta un toque exótico a este SUV premium que lleva ya 7 años en el mercado.
Hemos probado la versión equipada con el acabado ‘Ultra’, el más alto de la gama, y propulsada por el motor híbrido enchufable T6, con 350 CV y una autonomía eléctrica homologada de 81 km.
Una alternativa menos convencional para quienes busquen una imagen diferente, pues no pasa desapercibida.
Diseño exterior del Volvo XC60 Black Edition: su lado oscuro
El Volvo XC60 Black Edition no cambia en dimensiones con respecto a otras versiones del modelo: mide 4,70 metros de largo, 1,90 metros de ancho y 1,65 metros de alto, con una distancia entre ejes de 2,86 metros. Sin embargo, su acabado Onyx lo diferencia del resto, destacando por el negro brillante que lo cubre completamente. Desde la parrilla frontal hasta el logo de Volvo.
Uno de los detalles más llamativos son las ópticas frontales, que muestran la característica firma lumínica de Volvo: los famosos faros en forma de "T" que hacen referencia al martillo de Thor lucen especialmente, en contraste con todos los demás acabados en negro.
Y es que esto también aplica a los retrovisores, las barras del techo y las llantas de 21 pulgadas. Incluso en la parte trasera, tanto el nombre del modelo como la versión son de color negro y quedan prácticamente imperceptibles.
Diseño interior: un punto de luz
Al abrir la puerta del Volvo XC60 Black Edition, uno podría esperar un ambiente completamente oscuro, como ocurre con su carrocería, pero Volvo ha decidido añadir un poco de claridad al habitáculo. Las terminaciones en aluminio y las placas de estribo con el nombre de la marca contrastan con el exterior, así como la palanca de cambios, fabricada en cristal por los artesanos suecos de Orrefors, que añade un toque de sofisticación; está retroiluminada y recuerda a una joya, sobre todo de noche o cuando estamos en el garaje.
Además, encontramos un techo solar panorámico que permite que al interior llegue luz natural, lo que mejora la sensación de amplitud, y cuyo cristal laminado ofrece protección UV. Los asientos son de cuero Nappa en color negro "Charcoal" y encontramos también un sistema de sonido premium Harman Kardon, que suena especialmente bien. De manera opcional, se puede sustituir por una alternativa superior, firmada por Bowers & Wilkins.
El equipamiento de esta edición está basado en la versión Ultra, por lo que no faltan detalles como el volante calefactado con inserciones en negro piano o los asientos delanteros y traseros calefactados. También cuenta con un sistema purificador de aire a bordo, otro detalle premium que refuerza esa sensación de exclusividad y que, a su vez, marca la diferencia entre lo necesario y lo lujoso. Y que hay que pagar, claro...
Respecto a la tecnología a bordo, en el centro del salpicadero encontramos una pantalla táctil vertical de 9 pulgadas, que ofrece una excelente resolución y facilita la visualización de la cámara de aparcamiento de 360 grados. Este sistema, compatible con Apple CarPlay mediante cable, incluye también todos los servicios de Google. Y, personalmente, se agradece disponer de Google Maps sin necesidad de sincronizar el teléfono móvil.
Capacidad de carga del Volvo XC60 Black Edition
Dado que sus dimensiones no han cambiado, este XC60 Black Edition cuenta con el mismo maletero que el modelo estándar y ofrece una capacidad de 468 litros, que se amplía a 1.395 litros si abatimos los asientos traseros.
Aunque es un poco más pequeño que en la versión de gasolina debido al espacio que ocupan los componentes del sistema híbrido, sigue siendo un maletero práctico, con ganchos, rejillas y una toma de 12V.
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Al volante del Volvo XC60 Black Edition
El Volvo XC60 Black Edition que hemos probado equipa un motor híbrido enchufable T6, que ofrece 350 CV y 659 Nm de par, una potencia suficiente para mover sus más de dos toneladas con facilidad. Destaca por su agilidad en autovía, donde el sistema híbrido trabaja en conjunto con suavidad y ofreciendo un comportamiento muy refinado. Esto es posible también gracias al cambio automático de 8 velocidades por convertidor de par, que ofrece transiciones rápidas pero progresivas, sin tirones perceptibles, lo que nos da la sensación de que siempre estamos en la marcha adecuada.
En aceleraciones, el motor de combustión, un 2.0 litros de gasolina con 253 CV, toma el protagonismo frente al eléctrico, pero su respuesta es enérgica y contundente, brindando un dinamismo que acompaña al carácter deportivo de esta versión. Con esta mecánica, acelera de 0 a 100 km/h en 5,7 segundos y tiene una velocidad máxima limitada a 180 km/h, siguiendo la política de seguridad de Volvo.
El coche sigue siendo increíblemente silencioso, un efecto reforzado por los cristales laminados opcionales que aíslan el ruido del exterior. El chasis está muy bien equilibrado, ofreciendo una sensación de estabilidad en curva, lo que da seguridad si queremos movernos de manera más ágil.
De serie equipa una suspensión helicoidal en el eje delantero y de ballestas en el eje trasero, que, si bien es lo suficientemente confortable y efectiva, se puede sustituir por una suspensión neumática (disponible como opción por 2.450 euros), que permite ajustar la altura de la carrocería entre los diferentes modos de conducción -que se seleccionan a través de la pantalla central- para equilibrar aún más su comportamiento o a la hora de cargar objetos en el maletero.
La ergonomía es otro de sus puntos fuertes, con unos asientos Contour que tienen múltiples opciones de ajuste, tanto lumbar como para las piernas, permitiendo encontrar fácilmente una buena posición de conducción.
El confort del XC60 Black Edition en ciudad es aún mejor. La suspensión, que en carretera se siente firme y equilibrada, hace un excelente trabajo absorbiendo baches y badenes. La dirección es suave pero precisa y facilita las maniobras en espacios reducidos, algo muy útil en un vehículo de este tamaño.
De nuevo, el silencio es uno de los puntos fuertes en trayectos urbanos, sobre todo cuando el bloque eléctrico toma el control, permitiendo circular en modo cero emisiones durante la mayor parte del tiempo. Además, la respuesta instantánea del motor eléctrico nos otorga una buena capacidad de reacción, haciendo que movernos por la ciudad sea cómodo y fluido, con una buena aceleración.
Conclusión y precio del Volvo XC60 Black Edition
El Volvo XC60 Black Edition es una demostración de que, a veces, menos, es más. Su estética completamente negra le da un carácter único, que, junto a su equipamiento premium y su comportamiento dinámico, lo convierte en una opción atractiva para quienes buscan un SUV elegante, tecnológico y exclusivo.
Aunque el negro puede no ser del agrado de todos, esta edición especial aporta distinción, no cabe duda. Especialmente, si estás dispuesto a pagar la diferencia de precio de casi 10.000 euros frente a la versión estándar del Volvo XC60, pues el precio del Volvo XC60 Black Edition arranca en 65.064 euros.
Mucha potencia para un coche más bien familiar, suspensión neumática… y un maletero que personalmente para mí deja que desear. Cualquier modelo break lo supera, cualquier modelo del segmento D, del segmento C en sedán etc. Ya lo he definido con eso